Patio de luces

Con la reforma integral del edificio en 2024, decidimos recuperar uno de los elementos originales más significativos de nuestra arquitectura: el patio de luces. Durante décadas había permanecido cerrado y en desuso, pero lo reabrimos para devolverle su función original: llevar la luz natural a todos los niveles de nuestro espacio.

Hoy, este cielo abierto recorre el edificio de arriba abajo e ilumina zonas que antes quedaban en penumbra, como la zona del mostrador o los pasillos interiores. El acabado en azul petróleo, color identitario de la casa, refuerza la continuidad visual entre plantas y ayuda a generar una sensación de calma, amplitud y coherencia material.

Además de mejorar la experiencia espacial, la recuperación del patio de luces nos permite reducir la dependencia de luz artificial y optimizar el comportamiento energético del edificio. Es una forma de mirar atrás con respeto y, al mismo tiempo, avanzar con responsabilidad hacia el futuro.